“Junk culture”: el clásico de OMD regresa en vinilo a 40 años de su lanzamiento
La legendaria banda británica celebra cuatro décadas de su álbum más accesible con una reedición especial y sonido remasterizado desde las cintas originales.
Después de más de tres décadas fuera del circuito del vinilo, “Junk culture”, el quinto álbum de Orchestral Manoeuvres in the Dark, vuelve a la vida en un formato que le hace justicia a su esencia ochentera. Publicado originalmente en 1984, el disco marcó un giro radical de la banda hacia un pop más directo, tras la densidad experimental de Dazzle Ships.
Con fecha de lanzamiento para el 20 de junio bajo el sello UMR/Virgin, esta reedición 40 aniversario ha sido remasterizada desde los carretes originales de media pulgada y cortada a media velocidad por Miles Showell en los legendarios Abbey Road Studios. Entre sus joyas están los éxitos “Locomotion”, “Talking loud and clear” y la irresistible “Tesla girls”, que en esta versión aparece con un matiz distinto: se ha incluido la edición de Wisseloord, el estudio holandés donde se mezcló el álbum originalmente.
“Elegimos esta versión porque es la que tocamos en vivo, y siempre me ha parecido la definitiva”, explica Paul Humphreys, miembro fundador de OMD. “La del álbum original repetía el riff de piano dos veces al inicio, pero esta edición es más precisa, más contundente”.
En busca de reconquistar la radio y los charts, OMD dejó atrás Liverpool y se trasladó a los paradisíacos Air Studios de George Martin en Montserrat. El entorno caribeño dejó su huella sonora: “Locomotion” incorpora steel drums y vibraciones isleñas que dieron nueva vida a su propuesta electrónica.
“Queríamos tener hits. Este es, sin duda, el disco más pop y pegajoso que hemos hecho”, afirmó Andy McCluskey, cofundador de la banda. Y así fue: “Junk culture” los devolvió al centro de la escena con una fórmula que combinaba sofisticación tecnológica con sensibilidad melódica.
Para los fans de siempre y los nuevos oídos curiosos, esta reedición no solo es una joya nostálgica, sino una oportunidad única de escuchar a OMD en su punto más pop, con una calidad sonora que captura la calidez y el detalle que solo el vinilo puede ofrecer.
Este artículo es un contenido de NoEsFm