Ecos de Soda Stereo: nostalgia y tecnología en el Movistar Arena
Un regreso sin precedentes: Charly y Zeta en vivo junto a la voz y guitarra de Cerati gracias a un montaje innovador que promete ser mucho más que un holograma.
Después de semanas de enigmas y pistas en redes sociales, se confirmó lo que los fanáticos esperaban con ansiedad: Soda Stereo volverá a los escenarios con un espectáculo llamado Ecos. El anuncio oficial reveló que Charly Alberti y Zeta Bosio compartirán escena con Gustavo Cerati a través de una propuesta tecnológica que recreará en tiempo real su voz y sus guitarras, diseñadas especialmente para este concierto. La cita es el 21 de marzo de 2026 en el Movistar Arena de Buenos Aires, con preventa de entradas desde fines de septiembre. Según la productora PopArt, no se trata de un tributo convencional, sino de un show en el que “Soda Stereo siempre fuimos los tres”. A diferencia de la gira Gracias Totales de 2020, no habrá cantantes invitados ni reemplazos para Cerati.
El comunicado oficial describe el proyecto como un viaje donde “lo irreal se vuelve real”. En términos prácticos, el bajo y la batería de Zeta y Charly sonarán en directo, mientras que grabaciones de la voz y la guitarra de Cerati —extraídas de las giras de 1997 y 2007— se integrarán de forma sincronizada. La producción descarta el uso de hologramas tradicionales, videos de archivo o inteligencia artificial. Como remarcó Rolling Stone: “ni holograma, ni videos de archivo, ni inteligencia artificial”. La Tercera reforzó el concepto señalando que Cerati estará “presente gracias a la tecnología más novedosa disponible”, algo descrito incluso como “mucho más que un holograma”.
Lecciones de ABBA para un regreso argentino
El concepto detrás de Ecos toma inspiración de experimentos previos de realidad aumentada, en especial ABBA Voyage (2022). En ese proyecto, la legendaria banda sueca volvió a escena mediante versiones digitales (“ABBAtars”) de sus integrantes en la cúspide de los años 70, acompañados por una banda real de diez músicos. El proceso incluyó trajes de captura de movimiento, 160 cámaras registrando cada gesto y el trabajo de Industrial Light & Magic —la compañía de George Lucas— para rejuvenecer digitalmente a los músicos. Los resultados se proyectaron en una pantalla LED de 9,5 metros y 65 megapíxeles, con la técnica clásica de Pepper’s Ghost adaptada a gran escala. Así, los ABBAtars compartían escenario con músicos reales en un híbrido sorprendente que unía nostalgia y futurismo, respaldado por 30.000 píxeles ocultos en el suelo del recinto y un sistema de 291 parlantes para un sonido impecable.
Ese precedente marcó un antes y un después en la forma de concebir los conciertos. Mientras los hologramas volumétricos ya habían sido probados (Tupac en Coachella 2012 o Whitney Houston en formato orquestal), lo de ABBA fue distinto: un show “cinematográfico” en vivo, con una proyección 2D tan sofisticada que creaba la ilusión de presencia real. Expertos sostienen que este tipo de innovaciones abre la puerta a nuevas formas de entretenimiento donde la realidad aumentada, la inteligencia artificial o la realidad mixta permitan “teletransportar” artistas —vivos o fallecidos— a cualquier escenario.
Para Soda Stereo, el reto es mayúsculo. A diferencia de ABBA, no habrá un espacio diseñado desde cero, sino el Movistar Arena como escenario base. Eso implica recurrir a pantallas de altísima resolución y sistemas de proyección de última generación. Aunque la producción insiste en que “no hay holograma”, la frase “mucho más que un holograma” sugiere un entramado de video en tiempo real, gráficos generados por computadora y técnicas derivadas del Pepper’s Ghost. La clave será lograr que las transiciones entre las pistas de Cerati y la interpretación de Zeta y Charly se perciban fluidas y orgánicas. Algunos analistas especulan sobre un futuro con experiencias más inmersivas —realidad mixta o gafas de RA—, pero por ahora el objetivo es adaptar estos recursos al formato tradicional de concierto. En esencia, el principio es el mismo que en ABBA Voyage: recuperar grabaciones originales y combinarlas con efectos visuales para revivir a un artista ausente.
Legado y presente: guardianes de la historia de Soda
Más allá del despliegue técnico, Ecos es un gesto profundamente simbólico. Zeta y Charly se muestran convencidos de que Cerati aprobaría este tipo de regreso. Se asumen como guardianes de la memoria de Soda Stereo y reivindican que la historia del trío debe contarse desde dentro. La intención es acercar la música de la banda a nuevas generaciones, que quizá nunca pudieron verlos en vivo, pero ahora tendrán la experiencia de sentirlos como un todo palpitante. El propósito, como señalaron, es honrar a Cerati y compartir el legado de Soda sin alterar su esencia.
En definitiva, Ecos aparece como un hito donde nostalgia y vanguardia se encuentran. Inspirados en la hazaña tecnológica de ABBA Voyage y otros experimentos virtuales, Zeta y Charly apuestan a que el público viva la ilusión de un reencuentro imposible, pero auténtico en emoción. Si la promesa se cumple, el 21 de marzo los fans cantarán “De música ligera” y “Persiana americana” sintiendo que los tres miembros originales de Soda Stereo están de nuevo en un mismo escenario. Una banda que, como siempre dijeron, “nunca se fue”, vuelve ahora a latir con la fuerza de la tecnología más avanzada del rock en español.
Este artículo es un contenido de NoEsFm